lunes, 23 de junio de 2014

El país del fútbol y del carnaval es también el país de la violencia y la desigualdad Goles de mujeres, Planeta

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* Jogo bonito: “El fútbol brasileño es conocido por su astucia, su fluidez y su estilo ofensivo de juego, además de ser considerado como reflejo de la mezcla de razas de la sociedad del país. El principal estilo de juego se caracteriza por su creatividad, movimiento y está infundido por movimientos rítmicos. Es el conocido jogo bonito” (Wikipedia).





¿Cómo viven las mujeres un evento deportivo que trae mayor militarización en las áreas más pobres de las ciudades? ¿De qué manera resisten al desalojo de edificios y terrenos ocupados sin respuestas políticas al problema de la vivienda? ¿Cómo será la supervivencia de las vendedoras ambulantes bajo el mandato FIFA que les prohíbe trabajar durante el campeonato?
El fútbol atraviesa el planeta y en Brasil sacude problemáticas y pasiones que impactan en la vida diaria de las mujeres. “Al final cuando un hijo está enfermo, no sirve llevarlo a un estadio, es necesario llevarlo a un hospital”, pronosticaba un cartel en las manifestaciones de junio de 2013 cuando la población brasilera protestó en las calles de53 ciudades por el alza de los precios durante la Copa de las Confederaciones.
En Pikara Magazine publicaremos historias de resistencia, creatividad e insurgencia protagonizadas por mujeres que, en este contexto, resignifican la dificultad y logran imponer su propio juego bonito*.



Goles de mujeres #1: La copa del pueblo

Más de 4 mil familias viviendo en carpas construidas por lonas de plástico. Sin más que un colchón y algunos objetos personales. Con toda la dignidad necesaria para regalarse una auto-celebración el día en que el meta evento deportivo con los gastos más inusitados de la historia de los mundiales de fútbol da el puntapié de largada. Organizadas de manera cooperativa para la vida diaria mujeres, hombres, niñxs y ancianxs comparten la vida en un terreno parquizado, la cocina, el baño, las decisiones en asambleas y una promesa de que el terreno que hoy se llama “Copa do Povo” (Copa Del Pueblo) será para quienes hoy la ocupan. Celebrando su propia copa con pautas a favor de la igualdad, el acceso a la educación y la vivienda digna.

Agnes jugando al fútbol en la Copa del Pueblo./ Oliver Kornbliht Mídia NINJA
Miles de personas sin techo. Muchas fueron desalojadas por las políticas de remociones recientes, otras ya no pueden seguir pagando los alquileres, que en muchos casos subieron hasta un 100 por ciento; motivos potenciados a causa del evento deportivo organizado por la FIFA junto con el Gobierno de Brasil, que coloca a la Federación Internacional de Fútbol en un lugar de prioridad frente a la agenda de la ciudadanía. Gracias al Movimiento de Trabajadores sin Techo (MTST) cada vez son más fuertes las acciones de protesta (con varias conquistas) contra la principal problemática que viven las y los brasileros que quedan fuera del consumo y de la vida digna: la falta de vivienda.
El pasado viernes, ansiado por fanáticos de fútbol en todo el mundo, las mujeres de la ocupación Copa del Pueblo jugaron su propio partido y compartieron su mirada acerca de lo que están viviendo en su país, el gigante sudamericano enlodado en el marco de la mayor represión desde la última dictadura.
La cronista de Pikara estuvo en la otra Copa, la del carnaval callejero en la que quienes no tienen nada se dan el lujo de compartir todo.
“Soy Agnes, tengo 22 años y estoy acampando aquí desde que comenzó Copa do Povo, hace un mes y diez días. Hoy estamos haciendo la copa popular de la ocupación Copa del Pueblo y acabamos de hacer un acción en contra de la FIFA, prendimos fuego al muñeco de la FIFA, y otra acción en contra de Nike, que está financiando el evento. También conformamos un equipo y aquí vamos a jugar en la categoría de mujeres, que es una mezcla de varios grupos que son de la ocupación”.

¿Qué hizo que te mudaras a la ocupación?
Yo vivía en el campus de mi universidad UNESP, en el barrio de Pimentas. Pero la universidad esta cerca de Guarulhos (el aeropuerto) y todos los precios comenzaron a subir. Los estudiantes y trabajadores no tienen plata para pagar un alquiler. Tuve que dejar todas las cosas en casa de una amiga de mi madre porque me quedé sin casa y en ese momento me vine para acá.
¿Cómo fue el proceso de organización para ocupar este lugar?
El movimiento MTST fue quien organizó esta ocupación.
¿De qué manera están acompañando las marchas y manifestaciones?
Todo el mundo de la Copa del Pueblo estuvo presente en las manifestaciones de MTST y también estuvo presente en apoyo a los metroviarios.
¿Cómo te imaginas que será el día de hoy (apertura del mundial)?
Nosotros tenemos que recordar que nuestro Estado gastó dos millones en seguridad y eso significan bombas, balas de goma, y espero que no haya balas de verdad. Y acaba de informarme un amigo que hay cinco camiones hidrantes del Ejército; él me dijo: “La última vez que yo vi eso fue en la dictadura militar”. Primero que no es un día tranquilo porque hoy mi mamá quiso venir para acá y no lo consiguió porque la policía militar cerró las calles y más o menos diez vans ya fueron desviadas de su ruta normal. No están saliendo del metro Itaquera. Entonces tranquilo no está porque ellos ya están territorializando nuestro espacio, nuestro lugar tanto localmente como en el país. Creo que las personas que van a salir a las calles van a sufrir una represión muy grande.

En la puerta de tu barraca (campamento) hay un graffiti que dice “despertar la furia revolucionaria de la mujer”, ¿cómo es la acción de las mujeres aquí, que además hoy van a estar jugando fútbol?
Siempre jugué fútbol desde pequeña. A través del fútbol hoy nosotras queremos representar la categoría de las mujeres que están en la lucha: las trabajadoras, las prostitutas. Nosotras sabemos que el acoso sexual ha aumentado, la explotación sexual tanto de las niñas como las mujeres. Tratamos de representar a las trabajadoras: las cocineras, las peluqueras, las barrenderas y que son explotadas todo el tiempo, las estudiantes… por ser mujeres. Nosotras sabemos que vivimos en una sociedad machista. Cuando yo escribí lo de sacar la fuerza revolucionaria de la mujer lo hice en el sentido de crear una conciencia de clase y también qué pasa por nuestro deseo y qué nos pasa a nosotras en cuanto mujeres, mujeres lesbianas.
¿Venis percibiendo más violencia estas últimas semanas a causa de la Copa?
Entiendo que los “gringos” (extranjeros) tienen una visión estereotipada de la mujer brasilera; no sólo brasilera si no también latinoamericana. No sólo los gringos, sucede que desde la Copa también aumentó el capital, el dinero que está circulando, el dinero va a girar en función de eso también.


  1. Rachel Moreno
A mim, parece que ignoras la realidade y la historia brasileña, Florencia. É claro que todos los problemas acumulados em los anos de dictadura, de obediência al neoliberalismo, non fueran resolvidos en los pocos últimos anos mas, veja lo que diz Chico Buarque de Holanda…
“Verdade é que antes do PT chegar ao poder teve uma turma que ficou 500 anos mandando aqui no Brasil e esse país se tornou um paiseco de 5º mundo.
Entramos na década de 80 ainda sendo uma república das bananas, governados por ridículos generais sem voto, ditadores golpistas assassinos e ignorantes, que “preferiam cheiro de cavalo a cheiro de povo”.
Aí finalmente vem um partido que faz o Brasil avançar, tira nossa coleira dos USA, da um pé no traseiro do FMI, alça o país a 6º economia do mundo, fazendo o PIB saltar de 1 para mais de 2,4 trilhões em uma década, tira 50 milhões de brasileiros da pobreza, cria uma nova classe média de mais de 100 milhões com emprego, renda, carteira assinada e conta no banco…
Enfim, avanços EXTRAORDINÁRIOS em uma década!
Mas a mídia, conservadora e recalcada, sabota e cria um clima de que estamos “à beira do abismo”. E tem gente que vai na onda e não lembra do nosso passado medíocre…”

Goles de mujeres #2: Derechos en la piel

La Copa del Mundo de fútbol para gran parte de la población en situación de pobreza es un naufragio. Las actuales personas sobrevivientes a las olas gigantes de violencia y exclusión se aferran a sus derechos al tiempo que se niegan a entregar conquistas sociales.
La Copa del Mundo de fútbol para gran parte de la población en situación de pobreza es un naufragio. Las actuales personas sobrevivientes a las olas gigantes de violencia y exclusión se aferran a sus derechos al tiempo que se niegan a entregar conquistas sociales. Las ocupaciones urbanas y rurales y las constantes marchas en las calles son los ideales que las mantienen a flote en medio de un maremoto que no cesa.
[Derechos en la piel, registro Oliver Kornblihtt - Media NINJA]
En este marco movido y por momentos nauseabundo, la FIFA, artífice y co-organizadora del Mundial junto con el Gobierno, cuenta en Brasil con una especie de “zona liberada” en razón de sus beneficios. Son varios y centrales los aspectos que abarca esta flexibilización de aspectos y que beneficia a la corporación futbolera, entre ellos: leyes extraordinarias para criminalizar la protesta, excepción en el pago de impuestos y una presión sobre vendedores y vendedoras ambulantes en las ciudades-sede, convertidas en áreas de restricción comercial. “Sólo va a vender quien vista la camisa de los patrocinadores”, señalan en un extenso y completo informe de la Agencia Pública de Jornalismo.
El periódico Nova Democracia señala esta condición del país como un “neocolonialismo” cuando remarca que muchas medidas fueron tomadas para que “el inglés lo vea”. El mismo reportaje destaca que la conocida ‘Ley General de la Copa’ suspende -en un período anterior y posterior al evento- artículos de las leyes de Patentes y Extranjería, estatutos de las ciudades, de las hinchadas y de protección a ancianos y ancianas junto con leyes municipales que regulan el libre ir y venir por el territorio. La ciudadanía, sin embargo, no se ha quedado quieta ante magnánimas arbitrariedades. Las doce ciudades que son sede de eventos futbolísticos cuentan también con comisiones creadas y auto gestionadas por ciudadanas y ciudadanos comunes que se oponen a estas violaciones, abusos e ilegalidades en relación al Mundial y, en sólo dos años, a las Olimpiadas en 2016.
En este marco, el periodismo independiente está intentando dar cuenta del sello en la vida diaria que las disposiciones arbitrarias imponen. Políticas que para algunos medios son fácilmente descritas de la siguiente manera: “El objetivo de la reglamentación es dar a la FIFA la posibilidad de conducir las actividades comerciales a las zonas de concentración de fanáticos. Esto busca garantizar la exclusividad comercial y publicitaria de los patrocinadores oficiales”.
La calle, el bar y las paredes hablan. Basta salir a las calles a hablar con el vecindario, preguntar a taxistas, intentar palpar la experiencia diaria. Escuchar sus historias para percibir el impacto real del Mundial de Fútbol. Las consecuencias de estas medidas tienen cara, cuerpo y piel. Provocan angustias y desarman rutinas de aquellas personas que sobreviven en la cuerda floja del capitalismo salvaje.
Sidneia es vendedora ambulante de mini-pizzas, moradora de la ocupación paulista Copa Do Povo, y una activista por los derechos a la vivienda y la vida digna. En el video encarna con su experiencia la de miles de desplazadas y desplazados por la Copa. Aquellas personas que se quedaron sin casa, sin trabajo o que sufren la represión de la militarización.
Sidneia, desde la tienda en la que está viviendo hace pocas semanas, da la cara y describe la situación que vive Brasil: “Mostrar Río de Janeiro, las playas… todo es muy bonito. Pero cuando vas al fondo de las cosas que ves te encuentras con nosotros que somos pueblo sin techo, sin casa, pasando hambre, con un salario que es una miseria aquí en Brasil. Entonces vamos para la calle, pero no vamos para pelear, para enfrentar. Vamos para poder exigir nuestros derechos, el derecho de ser ciudadanos”.

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